Narni, una ciudad de cuentos

Clive Staples Lewis escribió, hace 60 años, una serie de libros conocidos como “Las crónicas de Narnia”, con una trama desarrollada en un mundo fantástico que, incluso, posteriormente, fue llevado al cine en una exitosa saga de películas ("El león, la bruja y el ropero", "El príncipe Caspian" y
"El viajero del alba"), y para la que Lewis se inspiró en Narni, esta pequeña ciudad del centro de Italia. Los romanos conocían a Narni como Nequinum y,  posteriormente a la anexión con Roma, en el 299 a.C.,  pasaron a llamarla Narniam, nudo principal de la via Flaminia,  gracias a la cual conocería un gran período de desarrollo económico. Narniam posee orígenes antiquísimos que se pierden en el neolítico, y surge sobre un espolón rocoso y en una posición que domina el valle del río Nera y la Cuenca Ternana. centro de luchas por el territorio desde las primeras invasiones bárbaras, y al igual que las otras ciudades umbras se desarrollo mucho durante la Edad Media y se convirtió en centro cultural de primera importancia en la región. En el 1527 fue saqueada y destruída por los Lanzichenecchi que se dirigían a Roma.

Narni, es hoy una localidad de 20 mil habitantes, y  para llegar a ella sólo hace falta alejarse un poco de las carreteras más tradicionales, y adentrarse en un camino que serpentea entre las montañas y la niebla. Su atmósfera es mágica, apenas uno arriba a Narni siente que se ha metido en un pueblo de cuentos, ya que se eleva a  240 metros sobre el nivel del mar, y la bruma que sube del río la envuelve en tinieblas. como en la historia de Lewis, pero, sin embargo, y a pesar de las coincidencias entre el original y la Narnia novelada, afirman que Lewis no habría pisado nunca esta ciudad, sino que, gran conocedor de la literatura romana en la que Narnia viene citada frecuentemente, habría elegido el nombre de su mundo de ficción ayudado por un viejo atlas geográfico de Italia, allá por 1949.  Un estudioso de Lewis señala que, aunque no hay indicación documental precisa de que el escritor se basara en el nombre latino de Narni, sí que menciona, en una carta a un amigo, la misiva que Plinio el Joven envió a su suegra alabando las excelencias de la villa de ésta en Narnia, por lo que esta es la teoría más plausible sobre el origen del nombre que usó para su obra. 

Toda la ciudad tiene un aire medieval, y alrededor de ella se distribuyen callecitas empinadas, placitas irregulares, iglesias románicas y fachadas góticas, que componen una estampa impactante, una primera impresión muy difícil de olvidar!



La Plaza de Narni está rodeada de edificios de prestigio como el Palacio Comunale (Ayuntamiento, 1273) que custodía obras del Ghirlandaio, y el Palacio de los Priores (1275), pero hay muchos otros lugares de interés en la ciudad, como la iglesia de San Francisco (siglo XIII) y sus frescos, la de San Agostino  que data del siglo XIV, la de Santa Margarita, la protorománica de Santa Pudenziana (siglos X - XI) y "lo Speco" de San Francisco, uno de los santuarios franciscanos más auténticos, ubicado a unos 14 km de Narni.

LEYENDA DE DOS ESCUDOS

Existe una leyenda medieval que cuenta cómo, entre Narni y la vecina Perugia, existía un grifo (criatura mítica, mitad águila y mitad león), que hizo que los habitantes de ambas ciudades se aliaran para derrotarlo y, una vez muerto éste, los peruginos se quedaron con su piel y los narnianos con las entrañas, razón por la cual el escudo de Perugia lleva un grifo blanco, mientras que el de Narni está formado por uno rojo. Al ser el león una de las partes que componen el símbolo municipal, abundan en los palacios históricos y en las iglesias las imágenes de este felino.

IL GATTAMELATA

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Erasmo da Narni, llamado el "Gattamelata", porque era inteligente como un gato, pero dulce como la miel, fue un líder famoso de la República de Venecia, que nació en Narni y murió en Padua. Narni recuerda a este hijo pródigo en multitud de sitios, rincones, y palacios, orgullosa de ese guerrero, cuya sola presencia heróica hizo temblar a una gran parte del centro y del norte de Italia, entre finales del siglo XIV y 1439 cuando, ya muy enfermo, se retira a Padova para morir años más tarde. La  casa natal del Gattamelata, se encuentra en Via Gattamelata, una vistosa callecita, flanqueada por un trecho de murallas que llevan su nombre. Cabe consignar que Donatello realizó una estupenda estatua ecuestre en bronce de este personaje, emplazada hoy en Padova, y que fue la primera por su envergadura, después de la de Marco Aurelio, del siglo II dC, que se puede visitar en los Museos Capitolinos de Roma. 



Estatua ecuestre del Gattamelata, en Padova . Foto web



Via Gattamelata - Narni

LA ROCA DELL´ALBORNOZ

La cima de la colina boscosa de Narni, a 332 metros sobre el nivel del mar, está presidida por la impresionante “Rocca dell’Albornoz”, una fortaleza que se terminó de construir hacia 1370 dC. Fue erigida sobre los restos de otra que, en el siglo XII, ordenara levantar el Emperador Federico I de Hohenstaufen, conocido como Federico “Barbarroja”, por iniciativa del cardenal español Gil Álvarez Carrillo de Albornoz, nuncio del Papa Inocencio VI - con sede en Aviñón - ante la Iglesia de Italia, donde permaneció hasta su muerte en 1367, contribuyendo en gran medida a la reorganización de los Estados Pontificios.
Además de su carácter defensivo, la “Rocca dell’Albornoz” se construyó como suntuosa residencia feudal, que ofrecía alojamiento a altos mandatarios eclesiásticos y políticos. Actualmente es patrimonio de la ciudad de Narni y está perfectamente restaurada, ya que su interior conserva toda su magnificencia original.

  

La Rocca dell´Albornoz - Foto web



EL PUENTE DE AUGUSTO

Del período de la romanización, han quedado en Narni numerosos vestigios de gran valor, como el Puente Augusto, del año 27 a.C., con una arcada imponente de 19 metros de ancho, considerado como uno de los más grandiosos de la época que aún sigue en pie, construido para que la Vía Flaminia pudiera atravesar el río Nera. Por otra parte está el célebre Acueducto della Formina, del siglo I a.C., que consta de 13 Km. de longitud, y que comienza en otro pueblo llamado Sant’Urbano, y termina en Narni. Además, de acuerdo con los escritos y tratados de Estrabón y de Tácito, en la cercana población de Stifone, perteneciente al municipio de Narni, era donde se encontraba el importante puerto que Roma había emplazado en esta área territorial, habida cuenta de que en aquellos tiempos el río Nera era navegable.



Puente de Augusto - Foto web

NARNI SUBTERRÁNEA

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En 1979, seis niños del grupo espeleológico de Narni, en Umbría, descubrieron en las ruinas de un antiguo convento dominico, un pequeño pasaje a través de una pared, cubierto de escombros y zarzas. A partir de ese día, y con la ayuda de otros voluntarios, comenzó la excavación y limpieza de los restos de las paredes, hasta que, por fin, en 1994 el sitio fue abierto al público bajo el nombre de Narni subterránea. La primera habitación que resultó ser una iglesia del siglo XII o XIII, cuyos frescos habían sido realizados por artistas de la Umbría en la Edad Media, y muestran un Cristo compasivo y sangrante, los cuatro símbolos de los evangelistas, la coronación de María y, numerosos retratos de S. Miguel Arcángel, a quien se dedicó la iglesia.

 

Foto web - Fuente:

http://www.narnisotterranea.it/

Junto a la iglesia hay una habitación excavada en la roca, con una antigua cisterna romana y donde se pueden ver muchas fotos del acueducto de Narni del siglo I dC, increíble obra de ingeniería, cuya construcción fue ordenada por el emperador Tiberio, para recorrer un camino de trece kilómetros, utilizando sólo los gradientes del terreno a lo largo de las colinas y puentes, y transportar el agua desde Sant'Urbano hasta Narni.

Un largo pasillo conduce a una gran sala, alguna vez ocupada por una "sala de tortura", (mencionada en unos documentos encontrados en los archivos del Vaticano), y en uno de sus lados aparece una pequeña puerta por la que se accede a una celda para prisioneros

En la celda se puede apreciar un número increíble de graffitis, tanto en las paredes como en el techo, que parecen envolver a todo aquel que entra en el sitio. En estos grafittis, los prisioneros contaban sus historias, usando yeso blanco y un afilado fragmento de piedra o madera a manera de cincel. Hay profusión de nombres, fechas, símbolos, que lograron llegar hasta nuestros días y, en todos ellos, un denominador común: "SANT'OFIZIO", lo que indica que se trató de una celda para los condenados por el Santo Oficio de la Inquisición.

Después de siglos de silencio obligado, las voces de los graffiti han recuperado sus sonidos, incluyendo los de un personaje "clave" que pasó aquí al menos 90 días en el año 1759: Giuseppe Andrea Lombardini, un guardia de la Inquisición que, por un giro desafortunado del destino, fue él mismo arrestado por haber favorecido la fuga de uno de sus compañeros de armas. Como Lombardini era un hombre de fe, quiso dejar en esos muros mensajes de paz y libertad pero, por temor ha que se los borraran, los escribió en un lenguaje simbólico muy poco conocido. ¿Corresponden, entonces, estos signos a alguna logia masónica, alquimia o cabalística?

Hoy en día fue posible reconstruir la historia de la Inquisición de Narni y de los personajes encerrados allí. Se mantiene todavía una leyenda que afirma que un fantasma aún habita dentro de estas salas, leyenda que comenzó a divulgarse a partir de que se sucedieran varios episodios inexplicables desde que salieran las ruinas subterráneas a la luz.

El recorrido termina en la majestuosa iglesia de Santa Maria Maggiore, hoy San Domenico, que hasta el siglo XIII fue la Catedral de Narni. En este edificio se pueden admirar los recientes descubrimientos arqueológicos, que incluyen espléndidos mosaicos bizantinos del siglo VI.
Debajo de Santa Maria Maggiore se descubrió recientemente un piso de mosaico bizantino y otras salas de las que, todavía, no se conoce la función que desempeñaban en la antigüedad, lo que nos da acabada idea de la riqueza arqueológica que custodia esta ciudad, y que aún resta por descubrir.

Fuente: http://www.narnisotterranea.it/